Una unión entre la exministra de Justicia israelí y líder del partido Hatnua (El Movimiento), Tzipi Livni, y el Partido Laborista podría obtener el mejor resultado en las próximas elecciones generales, que se celebrarán el 17 de marzo de 2015, según indica una nueva encuesta encargada por el canal de televisión de la Knesset (Parlamento).
El sondeo, elaborado por el instituto de investigación Paneles Política, señala que si los comicios se celebraran hoy, el Likud del primer ministro, Benjamín Netanyahu, obtendría 21 escaños.
Hogar Judío (derecha nacionalista religiosa), encabezado por el ministro de Economía, Naftali Bennett, conseguiría 18 escaños, mientras que Yisrael Beiteinu (ultraderecha), del ministro de Exteriores, Avigdor Lieberman, Yesh Atid (Hay Futuro, centro), liderado por el extitular de Finanzas, Yair Lapid, y el partido del exministro del Likud Moshe Kahlon conseguirían nueve cada uno.
La formación religiosa Judaísmo Unido de la Torá obtendría ocho escaños, el partido religioso Shas, siete, y de izquierdas Meretz, seis.
El Hadash –englobado en los partidos árabes, pero que está integrado también por judíos–, lograría cinco asientos en el Parlamento, así como la Lista Árabe Unida-Taal, mientras que Balad no alcanzaría el umbral de votos requerido. No obstante, se espera que los partidos árabes se unan antes de las elecciones.
Sin Livni, los laboristas encabezados por Isaac Herzog tendrían solo 17 escaños, según la encuesta, realizada entre 500 adultos israelíes con un margen de error de hasta un 4,5%.
El Parlamento ha aprobado hoy su disolución definitivamente para que se puedan celebrar las elecciones generales en marzo.
