"Para nosotros es una lección y una advertencia y haremos todo lo posible para que nunca sucedan en Rusia", indicó.
El presidente subrayó que el extremismo hoy en día es una herramienta geopolítica que sirve para cambiar las esferas de influencia.
"Las revoluciones de colores tuvieron consecuencias trágicas y los pueblos que fueron sometidos a experimentos irresponsables de injerencia directa o indirecta sufrieron en sus vidas cambios dramáticos", precisó Putin en una reunión del Consejo de Seguridad.
Putin subrayó que los actos extremistas pueden provocar infracciones del orden público en Rusia, un país multiétnico.
Señaló que la ideología extremista se está propagando en internet, sobre todo entre los jóvenes.
"Por lo tanto debemos prevenirlo de forma constante, amplia e insistente, erradicar sus premisas y detectar las causas que puedan provocar conflictos étnicos, sociales o religiosos", recalcó.
"Es necesario saber y comprender que azuzar conflictos entre personas de diferente etnia y religión, propagar una ideología ultranacionalista y llamar a derrocar por la fuerza al Gobierno son manifestaciones de una mentalidad antipopular, extremista", destacó el presidente.
A la vez, precisó que la lucha contra el extremismo en Rusia no tiene nada que ver con la lucha contra la disidencia y debe realizarse de acuerdo a la ley.
"Nuestro país es libre y democrático y los ciudadanos tienen derecho a tener su propia opinión, a expresarla y a estar en la oposición", explicó.