Los estudiantes hongkoneses y la policía se han vuelto a enfrentar esta madrugada después de dos semanas de calma en Mong Kok, el punto de ocupación que ha registrado una mayor beligerancia desde que las protestas prodemocráticas empezaron un mes y medio atrás.
El intento de arresto de un estudiante que apuntaba a los ojos con la linterna de su móvil a un agente desembocó en peleas violentas durante cuatro horas que terminaron con tres detenidos y un manifestante con heridas en la cabeza. Los estudiantes cargaron contra las posiciones de los agentes, armados con porras y escudos, quienes les repelieron con esprais de pimienta.
Decenas de los manifestantes en Mong Kok acudieron ocultos con la célebre máscara de Guy Fawkes popularizada en la película "V de Vendetta", un conspirador que intentó volar por los aires el Parlamento de Londres y se ha erigido en símbolo de la resistencia.
Los estudiantes y la plataforma cívica Occupy Central exigen un sufragio universal en 2017 sin el filtrado de candidatos previsto por Pekín. Las protestas se alargan sin que se intuya un final cercano debido a las posturas enfrentadas e irreconciliables de los dos bandos.
Los estudiantes, que permanecen en Mong Kok y Admiralty, buscan ahora llevar sus exigencias a Pekín debido a la incapacidad de las autoridades de la excolonia por avanzar en el conflicto.
Los frustrados líderes de las protestas han pedido hoy que una personalidad política de cierto peso arregle una reunión con las autoridades del Partido Comunista de China.
"Para convertir esa conversación en una realidad necesitamos un intermediario como Tung Chee-hwa (ex jefe ejecutivo) o Rita Fan (ex presidenta de la Asamblea Legislativa) que haga los preparativos y convierta el viaje en provechoso", ha manifestado hoy ante la prensa Alex Chow, presidente de la Delegación de Estudiantes de Hong Kong.
Los líderes habían manifestado la semana pasada su intención de aprovechar la inminente cumbre del Foro De Colaboración Económica del Asia Pacífico (APEC) para visitar Pekín e intentar hablar con los gerifaltes del Partido Comunista de China. Es poco probable que las autoridades permitan su entrada en la China del interior.
