Teresa Romero, la técnica de enfermería que se convirtió en la primera persona en contagiarse de ébola fuera de África, saldrá mañana miércoles del hospital, según anunció este martes un portavoz del centro sanitario Carlos III de Madrid.
Romero ingresó en el hospital el pasado 6 de octubre, tras infectarse del virus cuando cuidaba al religioso Manuel García Viejo, repatriado desde Sierra Leona, que murió el 25 de septiembre.
La enfermera fue oficialmente declarada curada de ébola el pasado 21 de octubre, pero permaneció en aislamiento mientras, según el parte médico, "los residuos virales que puedan quedar estén neutralizados".
"No tiene un significado médico real, no es fácilmente interpretable. De todas formas se tiene muy poca experiencia porque normalmente no se hacen análisis de los fluidos como se hace ahora, pero a la enferma se la considera completamente curada de la infección", señaló Fernando Simón, miembro del Comité Especial creado por el Gobierno para gestionar la crisis del ébola.
El pasado sábado 1 de noviembre, la auxiliar abandonó su situación de aislamiento en la sexta planta del edificio para pasar a una habitación convencional para seguir en observación.
Teresa, en principio, no asistirá a la rueda de prensa que el equipo médico tiene previsto ofrecer mañana. La técnica de enfermería había dicho a sus colegas y amigos que en cuanto saliera del hospital viajaría a Galicia para ver a su madre.
