El Fiscal General de la República de Brasil, Rodrigo Janot, afirmó este miércoles que la negativa de la Justicia italiana de extraditar al exdirector del Banco de Brasil, Henrique Pizzolato, crea un precedente "muy peligroso" y deja en evidencia las condiciones precarias del sistema carcelero brasileño.
"La estrategia de la defensa fue usar algunas cárceles que, en verdad, son auténticas mazmorras, lo que crea un antecedente muy peligroso para Brasil que hará que no consigamos extraditar a nadie desde la comunidad europea", declaró Janot, quien participó este miércoles de la reunión extraordinaria del la Comisión de Constitución y Justicia (CCJ) del Senado.
Por otro lado, negó la teoría que explica que la negativa de entrega sería una respuesta de Italia al gobierno de Brasil por haber negado la extradición del terrorista italiano Cesare Battisti, que enfrentaba un cadena perpetua en el país europeo pero que hoy vive en libertad en Brasil.
"Fue una larga negociación con la Justicia Italiana y con el Ministerio de Justicia y en ningún momento ese asunto fue expuesto. El interés que ellos tienen es que en estos casos específicos el gobierno de Brasil actúe con reciprocidad, y es lo que pensamos hacer", explicó.
Por último, en cuanto al problema de los presidios brasileños afirmó que dirigirá al Congreso Nacional un conjunto de propuestas elaborado junto con la Orden de los Abogados de Brasil y el Ministerio de Justicia llamado "Seguridad sin violencia" que propone la aplicación de políticas públicas que solucione, entre otras, esa situación a corto, medio y largo plazo.
