El primer ministro Benjamín Netanyahu inauguró el lunes la sesión de invierno de la Knesset (Parlamento israelí) con un discurso en el que destacó las preocupaciones de seguridad del país y la soberanía de Israel sobre Jerusalén.
"Israel tiene todo el derecho a construir en los barrios judíos de Jerusalén", afirmó, y subrayó que la "violencia que hay contra nosotros (en la ciudad) no es el resultado de la construcción (de viviendas) en Jerusalén".
Netanyahu hizo estas declaraciones tras ordenar que se acelere la construcción de más de mil viviendas en colonias judías de Jerusalén este, la parte palestina de la ciudad, ocupada por Israel desde 1967.
El primer ministro israelí considera que la parte este de Jerusalén pertenece a Israel, pero la ley internacional señala que es de los palestinos y está ocupada por Israel desde 1967.
Netanyahu reiteró que "el terrorismo no tiene su origen en la construcción" de más viviendas en asentamientos judíos en Jerusalén este sino que "viene del deseo de nuestros enemigos de que desaparezcamos de aquí".
"Los palestinos exigen el establecimiento de un Estado palestino sin paz y sin seguridad. Exigen la retirada (de los territorios ocupados), el derecho al retorno (de los refugiados palestinos expulsados de sus casas en lo que luego fue Israel, en 1948) y la división de Jerusalén. Se niegan a aceptar la condición elemental para la paz entre dos naciones: el reconocimiento mutuo", dijo Netanyahu.
El primer ministro israelí aseguró que no ve un deseo de paz en los palestinos y volvió a esgrimir su argumento de que "no hay mayor peligro para nuestra región que el intento por parte de Irán de convertirse en un Estado nuclear".
El líder israelí criticó sutilmente las prioridades de la administración estadounidense, que se centran en la amenaza que representan los grupos yihadistas y dejan de lado el tema iraní.
