La Unión Europea mantendrá en los próximos meses las restricciones impuestas contra Rusia, pero a partir de marzo de 2015 podría atenuarlas ante la presión de algunos de sus países miembros, según una fuente de Bruselas citada por Kommersant.
Los embajadores de los Veintiocho volverán a reunirse la tarde de este martes para analizar la situación en Ucrania y las medidas contra Moscú, aunque no está prevista ninguna decisión al respeto.
Las cosas podrían empezar a cambiar hacia el 15 de marzo de 2015, fecha hasta la que se amplió la vigencia de las sanciones. Para extenderlas más allá de ese límite, la UE necesitará un acuerdo unánime, algo que será difícil de lograr, sostiene el interlocutor europeo del diario.
"Si la situación en Ucrania se mantiene más o menos estable, varios países comunitarios se negarán a renovar las sanciones íntegramente y reclamarán su relajación", afirma la fuente.
Muchos países miembros, explica, están "especialmente molestos" con el último paquete de sanciones aprobado el 12 de septiembre tras el alto el fuego pactado en Minsk, "es decir después de que la situación en Ucrania comenzara a normalizarse".
Las relaciones entre Rusia y Occidente empeoraron a raíz de la crisis en Ucrania y la adhesión de Crimea al territorio ruso.
Desde el pasado 17 de marzo, la UE ha puesto en marcha un total de nueve paquetes de restricciones contra Rusia, que afectan a 119 políticos y empresarios y 23 compañías, así como a los sectores energético, financiero y de defensa.
