El cese de fuego en el este de Ucrania, acordado el 5 de septiembre en Minsk, se ha violado varias veces por ambos bandos; sin embargo el pasado fin de semana fue un período relativamente tranquilo por primera vez en los varios meses.
En Minsk el grupo de contacto para la resolución del conflicto ucraniano consiguió que Kiev y los independentistas de Donetsk y Lugansk pactaran una tregua, que entró en vigor el mismo día.
El acuerdo firmado prevé el canje de prisioneros según la fórmula de «todos por todos».
En la reunión participaron el embajador ruso en Ucrania, Mijaíl Zurábov, el primer ministro de la autoproclamada República Popular de Donetsk (RPD), Alexandr Zajárchenko, el primer ministro de la autoproclamada República Popular de Lugansk (RPL), Ígor Plotnitski, el presidente del Parlamento de Lugansk, Alexéi Kariákin, y el viceprimer ministro de la RPD, Andréi Purguin.
El expresidente ucraniano, Leonid Kuchma, representó al Gobierno de Ucrania, y la enviada especial de la OSCE para Ucrania, Heidi Tagliavini, su propia organización.
Un equilibrio inestable
El presidente del Consejo Permanente de la OSCE, Thomas Greminger, declaró este lunes que por lo general las partes cumplen con el cese del fuego, “aunque es inestable”. Opinó también que los próximos días serán decisivos.
Anteriormente, los presidentes de Ucrania y de Rusia, Petró Poroshenko y Vladímir Putin, abordaron en una conversación telefónica las medidas necesarias para que el alto el fuego sea estable.
“Los mandatarios de los dos países constataron que por lo general el cese del fuego se está cumpliendo. Petró Poroshenko y Vladímir Putin discutieron los pasos para que el alto el fuego tenga un carácter firme”, comunicó el servicio de prensa de Poroshenko.
Además, los líderes subrayaron que es necesario que la OSCE tome parte en el monitoreo de la situación. Kiev destacó que “se discutieron también cuestiones relacionadas con el envío de ayuda humanitaria a los habitantes de las provincias de Donetsk y Lugansk”.
Disparos pese a la tregua
La RPD informó de que el domingo pasado, las fuerzas armadas de Ucrania violaron la tregua siete veces. A raíz de los ataques, fueron heridos civiles y milicianos. El pasado 7 de septiembre la situación en Donetsk se mantuvo tensa. Las autoridades comunicaron que “se oían disparos por toda la ciudad”. Además, fueron atacadas varias localidades en las afueras.
A su vez, Kiev declaró que cumple rigurosamente el cese del fuego y acusó a los milicianos de violar el acuerdo alcanzado.
“Los militares ucranianos cumplen a rajatabla las condiciones de la tregua”, comunicó el portavoz del Centro de Información del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania (CSND), Vladímir Polevói.
La OSCE cree que no se debe dramatizar la situación a causa de unos cuantos.
“Debemos entender que cuando se pacta una tregua, siempre sucede lo mismo. Después de la firma del acuerdo debe pasar algún tiempo para que la orden sobre el cese del fuego llegue a los comandantes a través de todos los trámites. Siempre hay violaciones de ambas partes. Pero no creo que afecten la tregua de algún modo”, dijo en una entrevista a la cadena RT el portavoz de la OSCE, Kai Vittrup, que trabaja en la zona del conflicto.
Destaco que tiene “un presentimiento de que esta vez todo saldrá bien”.
“Si vamos a comparar lo que sucedía aquí hace una semana con lo que está sucediendo ahora, es el día y la noche”, recalcó Vittrup.
Milicianos pacíficos
El primer ministro de la RPD, Andréi Purguin, dijo el domingo a Nóvosti que las milicias de ambas repúblicas rebeldes cumplirán rigurosamente el acuerdo sobre el alto el fuego a pesar de las provocaciones de las tropas gubernamentales.
“Los milicianos no usan ni se plantean usar armas. Las autoridades y los habitantes de las repúblicas están seguros de que los objetivos de su lucha se pueden lograr por vía pacífica, con un diálogo”, dijo.
Según las milicias, a pesar de los bombardeos, ellos hacen todo lo posible para evitar el fracaso de los acuerdos alcanzados en Minsk.
El Estado Mayor de la RPD subrayó que las dos repúblicas “toman medidas adicionales para que todos los comandantes de las unidades cumplan estrictamente la orden de no dejarse provocar”.
OSCE como garante de la paz
Para mantener el régimen del alto el fuego, las repúblicas no reconocidas proponen enviar a observadores internacionales.
“Se puede garantizar la paz solo a través del monitoreo de la OSCE. Se necesita alejar la artillería a tiro y enviar a esas zonas a observadores internacionales”, declaró el primer ministro de la RPD, Andréi Purguin.
Canje de prisioneros
Las partes del conflicto ya están realizando el canje de rehenes.
Anteriormente, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional y de Defensa de Ucrania, Andréi Lisenko, dijo que “los acuerdos sobre el canje se respetan” y que “los terroristas colaboran”.
La información sobre el inicio del proceso también fue confirmada por el primer ministro de la República Popular de Donetsk, Alexandr Zajárchenko, quien precisó que el intercambio "se efectúa todos los días".
Acordaron continúan los contactos
El primer ministro de la RPD, Alexandr Zajárchenko, declaró a la emisora Kommersant FM que probablemente la tregua no dure mucho si las partes no adoptan otros pasos políticos hacia adelante. Precisó que tal vez esa cuestión sea objeto de discusión en la próxima reunión del grupo de contacto.
La reunión está prevista para dentro de 7 u 8 días.
“Según el acuerdo preliminar, habrá más participantes en el grupo. Tendrán que llegar varios representantes del presidente de Ucrania (Poroshenko). Sus nombres se están acordando. Donetsk y Lugansk serán representadas por (el viceprimer ministro de la RPD, Andréi) Purguín y (el presidente del Parlamento de la RPL Alexéi) Kariákin. De parte de Rusia llegará (el embajador ruso en Ucrania, Mijaíl) Zurabov”, dijo.
