El Tribunal Electoral de Río de Janeiro pidió ayuda al ejército para garantizar los comicios de octubre después de saber que varias áreas están controladas por grupos criminales, según un informe de inteligencia desvelado este jueves por el diario O Globo.
El informe secreto elaborado por el departamento de inteligencia de la Secretaria de Seguridad regional y con destino al tribunal encargado de organizar las elecciones en Río de Janeiro indica que hay 41 áreas de este estado brasileño bajo control directo de narcotraficantes y milicianos, lo que supuestamente dificultaría el libre desarrollo de la campaña electoral.
El documento, titulado “Extracto de Inteligencia de número 2 de las Elecciones 2014”, resalta que “fuentes fiables indican que tales grupos actuarían en la coacción de las personas que residen en esas localidades como forma de impedir el pleno gozo de los derechos políticos”.
El documento desvelado por el diario brasileño y que llegó al Tribunal Electoral de Río de Janeiro el pasado lunes también sostiene que los milicianos, grupos de civiles armados que operan al margen de la ley, están modificando sus tácticas en comparación con las elecciones de 2010.
De cara a los comicios del próximo cinco de octubre, estos grupos parapoliciales elaboraron listas con el número de los electores de las favelas y áreas que dominan para “imponer el miedo y el control constante de la población, imponiendo su poder a través del uso de armas y, muchas veces, practicando homicidios”, según el citado informe.
En las favelas controladas por narcotraficantes la estrategia consiste en dividir las áreas para ofrecérselas a los candidatos a cambio de dinero. El documento cita ejemplos concretos y agrega que la presencia de las polémicas Unidades de Policía Pacificadora en esos barrios no siempre inhibe esta práctica.
Estos hechos ya fueron denunciados en la primera semana de agosto por candidatos de Río de Janeiro de diferentes formaciones políticas, quienes aseguraron que bandas de narcotraficantes y grupos parapoliciales exigen pagos de hasta 43.000 dólares a quienes quieren llevar la campaña a los territorios que están bajo su control.
Casi un millón y medio de personas viven en las 763 favelas que hay en la ciudad de Río de Janeiro, según datos del último censo oficial de 2010 y que no muestra el número de personas que viven en esta situación en el resto del estado de Río.
El voto de estos barrios puede ser crucial para el resultado de las elecciones presidenciales, legislativas y regionales que Brasil celebrará el próximo cinco de octubre.
