La industria brasileña vive "uno de los peores momentos de su historia", según afirmó este miércoles el presidente de su patronal, Confederación Nacional del sector (CNI), Robson Braga Andrade.
Andrade se expresó así en declaraciones ante la prensa en un evento en Río de Janeiro en las que añadió que es empresario desde hace 37 años y no recuerda "haber pasado un período tan difícil" como el que ha afrontado el sector en el año pasado y lo que ha transcurrido de este 2014.
Asimismo, señaló que la perspectiva para 2014 es que la industria crezca por debajo del 1%, pese a que los pronósticos iniciales eran del 3%.
"Este año en la industria estamos perdidos, vamos a crecer entre el 0 y el 0,8% pese a que teníamos una expectativa de crecimiento mucho más vigoroso", dijo.
Entre las razones por las que la industria vive este momento, Andrade señaló la "elevada carga tributaria", el problema que supone la burocracia brasileña, la falta de crédito, la tasa da cambio que, en su opinión, "es muy inadecuada para la industria brasileña" y los elevados intereses.
Según concluyó, todos esos factores fueron los responsables de la baja actividad de la industria brasileña.
El presidente del CNI afirmó que sus expectativas para 2015 son más positivas, ya que considera que el año próximo la industria brasileña crecerá entre el 1,5 y el 2% y recordó que el Banco Mundial espera que Brasil crezca entre el 3 y el 3,2%.
Sin embargo, Andrade destacó que ese crecimiento estará lastrado por los malos resultados de 2014, lo que impedirá un despegue de la economía por encima del 3%.
En este sentido recordó que la industria automovilística está cayendo un 30%, la del acero está reduciendo su actividad así como el sector eléctrico y electrónico y el consumo se ha reducido drásticamente.
Por todo ello, los productos se mantienen en stock y no es necesario producir para sustituirlos, lo que limita las posibilidades de la industria.
