Con una gran parte de los dirigentes de las universidades iberoamericanas reunidos en Río de Janeiro para el III encuentro Universia en el que toma parte el vicerrector de la Escuela Superior de Economía (ESE) de Moscú, Sergei Erofeev, el académico ha podido observar que hoy existen muchas similitudes entre estos entes iberoamericanos y el mundo postsoviético.
Así lo expresó en una entrevista con Nóvosti en la que afirmó que tras conversar con rectores y dirigentes de universidades iberoamericanos ha observado problemas que existían en las mismas instituciones en Rusia durante la era postsoviética, especialmente a la era de internacionalizarse y atraer a alumnos de otros países.
Precisamente por esa voluntad de internacionalizarse Erofeev se ha acercado estos días hasta la III Cumbre Universia de rectores en la que ha podido poner en marcha su objetivo de que la ESE sea "la universidad progresista de Rusia" consolidando "relaciones con las más prominentes universidades del mundo, sean de Europa Occidental, Iberoamérica o del mundo anglosajón".
"Somos intelectualmente independientes, pero sabemos que tenemos que subir en el ránking mundial", comentó.
Para ello, según explicó, pretenden crecer en China y América Latina y aumentar "el número de alumnos internacionales que vengan a los campus de la ESE", tanto en Moscú como en San Petersburgo, para que "entiendan mejor cual es el objetivo de Rusia y los puntos en común" que tienen con sus países de origen.
Preguntado por su estrategia para atraer a alumnos internacionales que se desplacen hasta los campus de la ESE para estudiar afirmó que su política actual es "totalmente diferente a la época soviética".
Según comentó antes de 1989 la política para atraer a estudiantes hasta Rusia tenía un marcado carácter "geopolíticamente y con una notable base ideológica", mientras que hoy para la ESE es "mucho más importante la independencia académica, curiosidad científica y la voluntad de desarrollar cosas en conjunto".
Su interés en Brasil, país que considera "un nuevo mundo", ha crecido exponencialmente por las características que tiene en común con Rusia ya que es "similar en población, tecnología y está desarrollando ciencias sociales" que son importantes para su institución.
Asimismo, considera que unos y otros tienen "problemas similares".
Durante su participación en el III encuentro de rectores de Universia, Erofeev expresó que, además de ser una oportunidad para establecer contactos profesionales con universidades de todo el planeta, también fue una ocasión para "visitar diversas universidades brasileñas" con las que ha establecido relaciones que espera que fructifiquen en acuerdos para programas de intercambio de alumnos.
En este sentido y durante la cumbre que finalizó el martes fue lanzado el plan "Top Russia", una iniciativa desarrollada en colaboración con el programa Santander Universidades y que implementa una serie de programas de movilidad organizados entre universidades del país europeo y Brasil para promover intercambios académicos, culturales y de comunicación.
El programa, una muestra de cómo han fraguado las intenciones de aproximación de la ESE a Brasil, estará basado en cursos de verano de dos o tres semanas en inglés y con profesores de ambos países. La sede estará en la ESE en Rusia.
El acuerdo refleja la máxima que Erofeev expresó durante su entrevista con Nóvosti: "los brasileños están interesados en nosotros y quieren compartir experiencias y enviar alumnos".
Para el futuro, el vicerrector ya pergeña un "centro de cooperación iberoamericano" en la sede del ESE que sirva como nexo entre los dos continentes y que favorece el hecho de ser la universidad rusa con más cursos en inglés.
En su opinión es necesario ir "paso a paso" y establecer primero relaciones con "algunos países como Brasil", para posteriormente ampliar sus relaciones a otros de la región como Argentina y Chile que, a su juicio, "son de mucho interés".
Además, y en referencia a las nuevas potencias emergentes que componen el eje definido como Mint (México, Indonesia, Nigeria y Turquía) afirmó que también están trabajando para cerrar acuerdos.
"Tenemos mucho interés en las universidades turcas y ya estamos trabajando con ellos para atraer estudiantes", dijo.
Actualmente según dijo, está creciendo el número de estudiantes que llegan a Rusia, por lo que dentro de poco "será visto como un país muy acogedor".
Para conseguir convertirse en referente académico, destacó que es necesario "volverse un miembro del club" de los países más punteros en materia de investigación en todas las áreas científicas.
En este sentido, recordó que "desde los años sesentas Rusia ha estado en declive", pero la llegada de nuevos jóvenes estudiantes al país favorecerá el impulso atraído por la cercanía en sus idiosincrasias.
"Hay muchas similitudes entre los jóvenes de China, Rusia o Latinoamérica. Rusia puede convertirse en un país muy amistoso con Estados Unidos, Europa o Asia", concluyó.
