La Corte de París obligó al escritor francés, Grégoire Delacourt, a pagar 2.500 euros a la famosa actriz estadounidense, Scarlett Johansson, por usar el nombre de la estrella de Hollywood en su novela.
La novela titulada “La primera cosa que miramos” fue publicada en verano de 2013. Su protagonista, una joven francesa que lleva el nombre de Scarlett Johansson, sale con un mecánico.
El hecho de que la protagonista del libro no sea nada más que una "doble idéntica" de Johansson, se revela solo en el transcurso de la novela.
Desde la publicación, se vendieron más de 100.000 ejemplares del libro.
El tribunal apoyó el punto de vista de los abogados que calificaron el hecho de atribuir relaciones amorosas que nunca habían existido a Johansson como “doloroso y humillante”.
La defensa del escritor y de su editora se declaró estar “extremadamente satisfecha” con el veredicto y subrayó que la indemnización es “irrisoria”.
Johansson anunció la intención de presentar una demanda contra Delacourt en junio del año pasado exigiendo 50.000 euros. Además reclamó que se prohibiera traducir el libro o grabar películas basadas en él.
El escritor calificó entonces la reacción de la actriz de “muy triste” y dijo que su libro fue “una declaración de amor” oculta.
