La policía de Río de Janeiro recibió hoy 300 nuevos vehículos para patrullar las favelas, entre ellos ocho blindados equipados para pasar por encima de las barricadas montadas por narcotraficantes, informaron fuentes policiales.
Estos ocho vehículos tácticos serán utilizados por las unidades de élite de los dos cuerpos policiales del estado, el Batallón de Operaciones Especiales (BOPE) de la Policía Militarizda y la Coordinadora de Recursos Especiales (CORE) de la Policía Civil.
“Por primera vez las unidades asentadas en estas barriadas están recibiendo vehículos específicos para actuar en las regiones más conflictivas", dijo el comandante general de la Policía Militarizada de Río de Janeiro, el coronel Luís Castro.
Precisó que los vehículos serán utilizados para la defensa de los agentes y no para atacar.
Además destacó que la pacificación, nombre con el que se denomina al proceso de ocupación policial y militar de las favelas y la instalación de comisarías de policía en las mismas, "ha venido para quedarse".
Según afirmó durante el acto de entrega de los vehículos el comandante general de las Unidades de Policía Pacificadora (UPP) de Río de Janeiro, coronel Frederico Caldas, el objetivo de estos blindados de un tamaño menor "es facilitar el movimiento de las unidades de policía dentro de las favelas".
Los blindados tienen capacidad para transportar hasta trece agentes y cuentan con un equipamiento especial para poder garantizar la intervención en situaciones de extrema tensión en las favelas.
En dicho equipamiento destacan los neumáticos, capaces de rodar 20 kilómetros en caso de pinchazo o un sistema de detección y supresión de los incendios en el motor.
Asimismo, cuentan con un mecanismo hidráulico en la parte frontal del vehículo que ayuda a eliminar obstrucciones en medio de las calles.
Este elemento es de particular importancia ya que en numerosas ocasiones los narcotraficantes montan barricadas al paso de los vehículos de intervención policial, algo que este dispositivo puede eliminar.
El secretario de Seguridad del Estado de Río de Janeiro, máximo responsable en este área del gobierno regional, José María Beltrame dijo que estos vehículos "van a ayudar en el trabajo diario de los policías" porque tienen "la última tecnología del mundo" y posteriormente "fueron adaptados a la realidad" de la ciudad.
