Los observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) deben continuar su misión observadora en el este de Ucrania, declaró hoy a Nóvosti el embajador ruso ante la organización internacional, Andréi Kelin.
“Ahora se está discutiendo el futuro de la misión observadora en el este de Ucrania. Hay mucha preocupación por la seguridad de sus integrantes. No podemos descartar nuevos incidentes. Creemos que el grupo debe permanecer, en una composición reducida si es necesario, en los puntos clave para seguir monitoreando la situación”, dijo el diplomático.
Añadió que Rusia hace “todo lo necesario” para conseguir la liberación de cuarto observadores detenidos por las milicias de Slaviansk, en el este de Ucrania. A la vez, subrayó que su seguridad corre a cargo “de la parte ucraniana que acoge la misión”.
Anteriormente, el “alcalde popular” de Slaviansk, Viacheslav Ponomariov, reconoció que sus milicianos detuvieron a cuatro observadores de la OSCE.
“Hemos advertido a la misión de la OSCE de que no queremos que lleguen a la región de Donetsk. No nos hicieron caso y decidimos detenerlos (a los observadores)”, dijo a Nóvosti al añadir que “llevaban encima algunos equipos” que suscitaron sospechas.
Ponomariov reveló que los observadores detenidos se encuentran en la localidad de Makéevka y una vez concluida la investigación correspondiente, “serán puestos en libertad”.
Mientras, la OSCE confirmó esta tarde el “secuestro” de cuatro observadores en la provincia de Donetsk. Anteriormente se limitó a indicar que se perdió el contacto con ellos.
Asimismo, el portavoz de la organización, Shiv Sharma, declaró a Nóvosti que no puede de momento confirmar las palabras de Ponomariov ni tampoco el paradero de los desaparecidos.
