Las autoridades de Nueva York indemnizarán con 6,4 millones de dólares a David Ranta condenado injustamente a casi cuatro décadas de cárcel por un asesinato que no cometió, informaron hoy agencias.
Ranta fue condenado a 37 años de prisión en 1991 bajo cargos de homicidio de un rabino.
Según la investigación, Ranta, adicto a las drogas, era el único autor del crimen. Los testigos de la acusación corroboraron esta versión.
Más tarde se reveló que el instructor del caso ejerció presión sobre los testigos y utilizó testimonios falsos.
Durante la revisión del caso, en 2011, varios testigos retiraron sus declaraciones. El 21 de marzo de 2013, Ranta, que entonces tenía 59 años, fue liberado y al día siguiente sufrió un ataque cardíaco.
