El presidente de Rusia, Vladímir Putin, se declaró hoy conservador en lo que respecta a la defensa de los valores сapitales, sin los cuales considera imposible el avance de la sociedad rusa.
“Para mí lo importante no es criticar los valores occidentales, lo importante es proteger a nuestra población de algunos presuntos valores, que resultan muy difíciles de interpretar para nuestros ciudadanos”, dijo Putin en su gran conferencia de prensa anual en Moscú.
La corresponsal de una cadena de televisión estadounidense preguntó al jefe de Estado por qué los “valores espirituales” han adquirido tanta importancia en Rusia y a qué se deben sus críticas a Occidente sobre el particular, en clara alusión a la ley rusa que prohíbe la propaganda homosexual entre menores.
”No se trata de criticar a alguien, se trata de protegernos de un comportamiento bastante agresivo de algunos grupos sociales que, desde mi punto de vista, viven como quieren y, además, imponen sus criterios, y de modo muy agresivo, a otras personas y en otros países”, dijo Putin.
El mandatario ruso, que igual que la periodista evitó mencionar a los homosexuales, recalcó que esta es la “única explicación” de su actitud “acerca de ciertas cuestiones que Usted ha insinuado”.
“En cuanto a los valores tradicionales, realmente considero que debemos prestarles mayor atención”, indicó.
Putin dijo que es partidario de un enfoque conservador, en el sentido que dio al conservadurismo el filósofo ruso Nikolái Berdiáev, como “aquello que no estorba el avance o el ascenso e impide el retroceso y la caída”.
Incluso en tiempos de la Unión Soviética, donde dominaba la ideología, dijo, “existían valores casi religiosos”.
“El Código del Constructor del Comunismo (vigente en la URSS en los años 60-80) era una mala copia de la Biblia”, dijo Putin, pues “contiene todo, aunque relatado de modo primitivo y horriblemente recortado”.
Hoy, cuando aquel código desapareció junto con la URSS, “en relevo solo pueden resurgir esos valores tradicionales, sin los que la sociedad degrada”, indicó.
“Sin duda alguna, debemos volver a ellos, justipreciar su importancia y, a partir de esos valores, continuar nuestro avance”, dijo el presidente ruso.
