La mayoría de los rusos cree que sus servicios secretos deben espiar a países extranjeros, ante todo EEUU, según una encuesta del Centro FOM citada hoy por el diario Kommersant.
El 66% de los rusos no duda de la necesidad de espiar a otros países. Solo el 10% cree que la inteligencia no deber interceptar las comunicaciones de ciudadanos extranjeros. El 24% no se ha formado una opinión clara al respecto.
Seis de cada diez rusos sugieren espiar incluso a países amigos, frente al 21% que lo considera inadmisible.
Según el director del FOM, Alexandr Oslon, los ciudadanos se imaginan la labor de un agente secreto a través de los libros de ficción. También el diputado y exjefe de la KGB, Nikolái Kovaliov, cree que la gente no distingue claramente entre la realidad y la ficción.
El 39% quiere que los servicios secretos rusos prioricen la vigilancia de los movimientos de los estadounidenses, el 10% creen que es mejor espiar a China, y el 9% no quitarían ojo a Gran Bretaña.
El 81% de los rusos está convencido de que la inteligencia estadounidense espía a Rusia, pero el 49% considera que las autoridades locales hacen lo posible para blindar las fronteras contra espías.
