La jurista suiza Carla Del Ponte, miembro de una comisión de la ONU que investiga violaciones de derechos humanos en Siria, se vio obligada a posponer su anunciado viaje a Damasco debido a “presiones”, dijo hoy a RIA Novosti una fuente diplomática.
“El jefe de la comisión, Paulo Pinheiro, presionado fuertemente, ejerció presión a su vez sobre Carla Del Ponte. Planteó que podría ir a Siria solo en calidad de miembro de esta Comisión y solo acompañada por su jefe”, informó.
Anteriormente, el Damasco oficial dio autorización solamente a Del Ponte para visitar Siria, con el fin de investigar los supuestos ataques químicos, tanto en Guta Oriental, el 21 de agosto, como en Jan al Asal, provincia de Alepo, donde, según el régimen, 26 personas murieron en marzo pasado a raíz de un ataque rebelde con sustancias químicas.
Damasco no coopera oficialmente con dicha Comisión al afirmar que presenta informes no objetivos y silencia los crímenes cometidos por los rebeldes. Las autoridades sirias estaban en contra de la institución de esta Comisión pero no rechazaron una posibilidad de cooperar.
Moscú a su vez señaló en más de una ocasión que las conclusiones de la Comisión no son imparciales. En el último informe sobre la situación siria, que abarcó el período del 15 de enero al 15 de mayo de 2013, sus miembros llegaron a la conclusión de que en Siria fueron usadas armas químicas, pero no especificaron por quién.
Las autoridades sirias y la oposición se culpan mutuamente de su uso. Los países occidentales, incluidos EEUU y Francia, acusaron a Damasco y anunciaron la disposición a asestar golpes puntuales sobre territorio sirio.
La Comisión de la ONU de investigación de violaciones de derechos humanos en Siria la componen Paulo Pinheiro (Brasil), Karen Abuzayd (EEUU), Carla Del Ponte (Suiza) y Vitit Muntabhorn (Tailandia).
Siria es uno de los países que no han firmado la Convención sobre Armas Químicas de 1997.
