El presidente de Rusia, Vladímir Putin, firmó hoy la ley encaminada a luchar contra la “influencia ilícita sobre los resultados de competiciones oficiales”, es decir el amaño de partidos.
El documento prevé una pena de hasta siete años de cárcel o una multa de hasta un millón de rublos (unos 31.000 dólares a cambio actual) por organizar partidos amañados y prohíbe a los atletas, entrenadores, árbitros y otros participantes de las competiciones hacer apuestas de sus respectivos deportes.
La ley reglamenta asimismo las sanciones para las federaciones deportivas por la violación de la ley, hasta la retirada permanente de la acreditación, y prohíbe a los corredores aceptar apuestas sin que el individuo confirme su identidad.
