Es incierto el futuro político del opositor ruso Navalni

© RIA Novosti . Daria GorbatenkoEs incierto el fututo político del opositor ruso Navalni
Es incierto el fututo político del opositor ruso Navalni - Sputnik Mundo
Síguenos en
El activista opositor y candidato a la alcaldía de Moscú Alexéi Navalni es condenado a cinco años de prisión tras ser declarado culpable de robo y fraude. Aún no está claro si esto significa el fin de la carrera política de Navalni o, al revés, marca el inicio de una nueva etapa.

El activista opositor y candidato a la alcaldía de Moscú Alexéi Navalni es condenado a cinco años de prisión tras ser declarado culpable de robo y fraude. Aún no está claro si esto significa el fin de la carrera política de Navalni o, al revés, marca el inicio de una nueva etapa.

Perspectivas políticas

Poco hay que decir sobre las perspectivas políticas de Alexéi Navalni, ya que son simplemente inexistentes dentro del sistema político actual.
Se debe a que las enmiendas a la legislación electoral aprobadas en mayo de 2012 establecen que  los ciudadanos con antecedentes penales por delitos graves y muy graves quedan inhabilitados de por vida para presentarse a elecciones.

Por lo tanto, si se mantiene el veredicto de culpabilidad, Alexéi Navalni puede olvidarse de la carrera parlamentaria, y también de participar en las elecciones para gobernador o presidente.

“El veredicto contra Navlani no parece tanto un castigo como un intento de aislamiento de la vida social y del proceso electoral”, señaló en su cuenta de Twitter Alexéi Kudrin, exministro de Finanzas muy cercano al presidente, Vladímir Putin. Y es algo que resulta evidente: las puertas a la política oficial quedarán cerradas ante Navalni para siempre.

De hecho, significa que la posterior carrera política del bloguero opositor será posible únicamente al margen de la legislación vigente, o, al menos, de la práctica legal. Esto, a su vez, exigirá unos cambios radicales dentro de la “máquina política” existente, y, tal vez, incluso la supresión del modelo político actual.

Su propia elección

Probablemente este sea el principal objetivo de Navalni. No en vano en los últimos meses endureció su retórica: intensificó sus ataques tanto contra el sistema político en general, como contra sus representantes del más alto nivel.

La lógica de sus mensajes era transparente: no quiero compromisos, quiero destruirles a Ustedes y abolir todas sus reglas, y están libres de destruirme a mí, a modo de respuesta.

En este contexto es evidente que los simpatizantes del bloguero rebelde perciban la condena a Navalni como una venganza política, aunque no lo sea. De hecho, la postura de Navalni, a pesar de su éxito como generador de proyectos imaginativos y autor de eslóganes hirientes para la clase política en el poder, no era demasiado fuerte como para vengarse de él de esta manera.

Sea como fuera, el resultado el mismo: la política rusa ha perdido a un personaje carismático que no quiso, por elección propia, buscar compromisos con los que están en el poder. Quizás, porque los considere inaceptables.

Sin un lenguaje común

Esta situación en ajedrez se llama Zugzwang (literalmente en alemán, “obligación de mover”), cuando cualquier movimiento provoca empeorar la posición del jugador.  Cualquier resolución del tribunal tendría unas matizaciones marcadamente políticas.

La estructura organizativa vertical del poder nunca ha sido fácil de manejar. Ahora, en las condiciones de turbulencias políticas es más complicado que nunca: las autoridades locales muchas veces malinterpretan las indicaciones “desde arriba” hasta desvirtuarlas por completo. En otras palabras, el peligro consiste en que la condena a Navalni, sea justificada o no, podrá dar lugar a procesos judiciales por encargo político contra los que critiquen a las autoridades regionales, o contra los que estas autoridades quieran presentar como tales.

Por un lado, la sentencia absolutoria contribuiría al ascenso político del bloguero y activista ciudadano y debilitaría a la élite gobernante criticada por él. Por el otro, un veredicto de culpabilidad podrá ser interpretado por los ciudadanos rusos como una prohibición directa de criticar públicamente la gestión del gobierno.

Los detractores de Navalni preguntan ¿y si el líder de la oposición espontánea realmente es culpable de los cargos presentados? Los partidarios del bloguero responden lo de siempre: la justicia rusa es muy selectiva y arbitraria.

La pobreza del lenguaje político común es imposible de compensar con las sentencias judiciales, sean absolutorias o acusatorias. Tampoco contribuiremos a enriquecerlo con la exclusión del proceso político ruso de Alexéi Navalni, que a pesar de sus métodos “gamberros” representaba un soplo de aire fresco en el mundo estancado de la política rusa.

LA OPINIÓN DEL AUTOR NO COINCIDE NECESARIAMENTE CON LA DE RIA NOVOSTI

Lo último
0
Para participar en la conversación,
inicie sesión o regístrese.
loader
Chats
Заголовок открываемого материала