El Consejo de la Federación, o Cámara Alta del Parlamento ruso, avaló este sábado una ley que prohíbe a los altos cargos públicos la posesión de cuentas bancarias, acciones y otros instrumentos financieros en el extranjero.
El pasado 24 de abril, esta normativa legal fue adoptada en tercera y definitiva lectura por la Duma de Estado (Cámara Baja). Para entrar en vigor, el documento debe ser firmado por el jefe del Estado y publicado en el diario oficial Rossiyskaya Gazeta.
La prohibición se extiende a los altos cargos de la Fiscalía General, el Banco Central y de la Administración, jueces, parlamentarios, candidatos a cargos de elección, jueces, militares, empleados del Interior, Aduanas y organismos fiscales, así como otros funcionarios, sus cónyuges e hijos menores.
Se les concede un plazo de tres meses para cumplir los requisitos de la nueva ley o dimitir. De lo contrario, serán destituidos.
La posesión de inmuebles en el exterior no estará prohibida pero funcionarios y diputados deberán declararla y desvelar las fuentes que financiaron la compra.
