Expertos surcoreanos consideran que Corea del Norte produjo por cuenta propia las piezas clave del cohete de largo alcance que lanzó el pasado mes de diciembre, comunicó hoy desde Seúl la agencia de noticias Yonhap.
Tras analizar los fragmentos de la primera etapa del cohete, recuperados del mar al oeste de la península, los peritos llegaron a la conclusión de que Pyongyang realmente ensayó un misil intercontinental con alcance de hasta 10.000 kilómetros.
Sus principales componentes, a excepción de algunos materiales disponibles en el mercado e importados de otros países, fueron hechos en Corea del Norte.
Una fuente del Ministerio de Defensa surcoreano dijo a Yonhap que “la comunidad internacional mantendrá una serie de discusiones acerca de si conviene agregar dichos materiales a la lista de productos sujetos al régimen de control” de las tecnologías de misiles.
Corea del Norte realizó el pasado 12 de diciembre el exitoso lanzamiento de un cohete de largo alcance Unha-3 que despegó desde el cosmódromo de Sohae con el satélite Kwangmyongsong-3 a bordo. La anterior prueba de Unha-3, el 13 de abril pasado, resultó un fracaso. Minutos después de ser lanzado, el cohete se desintegró y cayó al mar Amarillo.
Las resoluciones 1718 y 1874 del Consejo de Seguridad de la ONU prohíben a Corea del Norte realizar pruebas nucleares y lanzamientos de misiles de largo alcance.
