La marcha de la oposición rusa contra la “ley Dima Yákovlev” reunió hoy en el centro de Moscú entre 30.000 y 50.000 manifestantes, según los organizadores de la protesta, y 7.000 personas, según las estimaciones de la Policía local.
La marcha comenzó a las 14:00 hora de Moscú (-3 GMT). Inicialmente, los organizadores esperaban 20.000 personas.
Los manifestantes, que marchan en dos columnas por una ruta acordada con las autoridades moscovitas, portan pancartas con los retratos de legisladores rusos (que votaron a favor de la polémica norma) y la palabra “vergüenza”.
La protesta, también denominada “Marcha contra los Canallas” se convocó para exigir la derogación de la ley Dima Yákovlev y la disolución de ambas cámaras del Parlamento nacional, la Duma de Estado y el Consejo de la Federación, que aprobaron la polémica norma en réplica al Acta Magnitski que prohíbe la entrada en EEUU a un grupo de funcionarios públicos rusos supuestamente implicados en violaciones de derechos humanos.
La ley Dima Yákovlev lleva el nombre de un niño ruso de dos años que murió en EEUU en 2008 después de que su padre adoptivo lo dejara encerrado en un coche durante más de nueve horas bajo un sol abrasador. Aunque la legislación estadounidense prevé para estos casos hasta diez años de cárcel por homicidio involuntario, el padre del pequeño fue absuelto de todos los cargos.
La nueva norma fue duramente criticada por los sectores liberales en Rusia que la calificaron de política. Sin embargo, el 56% de los rusos avalan la idea de prohibir a los estadounidenses adoptar niños en Rusia, frente al 21% que rechazan tal medida, según una encuesta.
El Senado de EEUU emitió el pasado 2 de enero una declaración en la que pidió al Gobierno ruso revisar la ley y en primer lugar permitir la adopción de los 46 niños rusos que ya fueron preasignados a familias norteamericanas. Los legisladores estadounidenses indicaron que 60.000 huérfanos rusos han encontrado hogar y trato afectuoso en su país en los últimos 20 años.
