Turquía no tiene intención de entrar en guerra con Siria, declaró el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan.
"No tenemos ninguna intención de librar una guerra. Pero que nadie ponga a prueba nuestra paciencia", subrayó el primer ministro al señalar que “Turquía está por la paz y la seguridad en la región y que esta posición es sólida”.
Erdogan resaltó que el incidente ocurrido el 3 de octubre en la frontera con Siria, que cobró vidas humanas, “no es el primer ataque. Antes ya ocurrieron otros 7 casos similares pero sin víctimas. Por lo que guardamos la calma. Pero lo ocurrido en Akcakale no puede considerarse como un incidente ordinario".
El gobierno turco, según palabras de Erdogan, informó de inmediato a los líderes de la OTAN, la ONU y a los miembros del Consejo de Seguridad sobre la situación en su frontera y la posición adoptada por Ankara.
La víspera, cinco personas murieron en Akcakale, sureste de Turquía, al caer sobre su territorio un proyectil lanzado desde la vecina Siria. Trece personas, incluidos tres policías, recibieron heridas graves.
En respuesta, Turquía abrió fuego contra el sector del territorio sirio desde que fueron lanzados los proyectiles.El parlamento de Turquía celebró este jueves una reunión a puerta cerrada en que concedió al Gobierno el mandato de un año de duración para realizar operaciones militares transfronterizas, en particular, contra Siria.
