La Alta Corte de Londres comenzó este jueves las audiencias preliminares a la investigación judicial en el caso de Alexandr Litvinenko, exagente de la KGB y después del Servicio Federal de Seguridad de Rusia, que se fugó a Reino Unido y, según la justicia británica, murió envenenado con polonio en 2006.
El juez que preside las audiencias, Robert Owen, fijó para el año 2013 el comienzo de la propia investigación que tiene como objetivo determinar las circunstancias y las causas de la muerte de Litvinenko pero, a diferencia de una investigación criminal, no se dedicará a buscar y procesar a los culpables.
Se espera asimismo que en las audiencias se haga público el informe de autopsia de Litvinenko que nunca se dio a conocer de forma oficial.
Alexandr Litvinenko, fugado a Reino Unido en 2000, falleció en Londres a los 43 años de edad en noviembre de 2006, poco después de obtener nacionalidad británica.
Litvinenko fue autor de los libros “Rusia dinamitada: Tramas secretas y terrorismo de Estado en la Federación Rusa” y “El grupo criminal de Lubianka” en los que acusó a los servicios secretos rusos de organizar las explosiones de viviendas en Rusia en 1999 para facilitar el ascenso de Vladímir Putin al poder.
Tras su muerte, los expertos de la Agencia de Salud británica afirmaron haber hallado en su cuerpo “cantidades considerables” de polonio 210, una sustancia radiactiva altamente tóxica.
Las autoridades británicas señalaron como sospechoso del asesinato de Litvinenko a otro exagente, Andrei Lugovoi, con quien se encontró en el hotel londinense Millenium poco antes de la muerte.
La Fiscalía rusa rechazó, por inconstitucional, la extradición de Lugovoi a Londres aunque expresó su disposición para colaborar con la Justicia británica y procesar al empresario en Rusia, si se descubriesen evidencias suficientes para ello.
