La policía antinarcóticos de Rusia informó hoy el fin de una operación por mar que duró cuatro años para desmantelar una banda de narcotraficantes con planes de introducir cocaína desde el Ecuador por un valor de 85 millones de dólares.
De acuerdo con declaraciones del jefe adjunto del Departamento de Investigación del Ministerio del Interior, el general Serguei Borodulin, como resultado de la operación que comenzó en 2008, en el Golfo de Finlandia, fue interceptado un buque mercante que tenía previsto ir a San Petersburgo proveniente del puerto de Guayaquil, Ecuador con una carga de 70 kilogramos de cocaína.
Borodulin explicó que a bordo de la nave fueron incautados 70 kilogramos de cocaína pura y que se trató de una operación de alta dificultad, ya que la banda criminal conformada por ciudadanos de Rusia, Ucrania, Colombia, Letonia, Ecuador y Perú, tenían un esquema casi perfecto de trabajo, en el que utilizaban tres idiomas, en particular, ruso, español y armenio.
El general develó que bajo la apariencia de trabajadores portuarios, colaboradores a sueldo de la banda, ingresaban la cocaína a la nave en paquetes especialmente etiquetados.
"En la actualidad, la investigación preliminar sobre la actividad del grupo criminal internacional se completó y la acusación contra los narcotraficantes, ocho de los cuales ocho están encarcelados en Rusia, fue enviada a la Fiscalía General para su aprobación", reveló Borodulin en una conferencia de prensa en RIA Novosti.
El general precisó que en 2010, uno de los principales miembros de la banda, el ucraniano, Valentin Voinovski, fue descubierto en Bielorrusia. En tanto el líder del grupo, Vladimir Kracavchik, buscado por la INTERPOL, fue identificado en los Países Bajos, de donde pronto será extraditado a Rusia.
Según el Departamento de Investigación del Ministerio del Interior ruso, desde 2002 se tienen informes sobre el tráfico de cocaína a Rusia procedente de Latinoamérica.
El Ministerio del Interior ruso, dio a conocer que entre los principales productores de cocaína en América figuran Perú, Colombia, Bolivia y que de acuerdo con datos oficiales a Rusia cada año ingresan de 3 a 5 toneladas de la droga, cuyo precio de venta en el proceso de "tráfico" se incrementa cerca de 500 veces.
