Los jefes de los Estados miembros de la Alianza Atlántica reunidos del 20 al 21 de mayo en la cumbre de la OTAN en Chicago, EEUU, emitieron una declaración en que expresaron su inquietud por el uso selectivo de la Justicia en Ucrania, ante el presidente Víctor Yanukóvich, presente en la reunión.
“Nos preocupa el uso selectivo de la Justicia (en Ucrania) y la persecución por motivos políticos obviamente de unos líderes de la oposición, así como las condiciones en que los mantienen en centros penitenciarios”, dice ese documento publicado por la agencia noticiosa ucraniana UNIAN.
Los jefes de Estado instaron a Ucrania a garantizar la supremacía del Derecho en su sistema judicial y adecuarlo a los convenios internacionales firmados por Kiev, así como a garantizar el carácter libre y limpio de los comicios parlamentarios que se celebrarán en la república en otoño próximo.
Por otra parte, los primeros mandatarios de los países de la OTAN aplaudieron el aporte de Kiev a la operación que se llevan a cabo al mando de la OTAN.
No es la primera vez que los países occidentales expresan inquietud por la persecución judicial en Ucrania de los antiguos altos funcionarios y actuales opositores, en particular, de la ex primera ministra Yulia Timoshenko condenada a siete años de prisión por abuso del poder al firmar unos convenios de gas con Rusia en 2009.
Occidente pide a Kiev liberarla. En señal de protesta contra la reclusión de Timoshenko, varios políticos europeos se negaron a viajar a Ucrania para asisir a la celebración del campeonato de fútbol EURO 2012. La Unión Europea vincula a menudo la perspectiva de Ucrania de integrarse en la UE con el caso Timoshenko y los de otros opositores.
