Corea del Norte pretende seguir desarrollando las tecnologías aeroespaciales nacionales con miras a poner en órbita un satélite suyo pese a que el Consejo de Seguridad de la ONU condenara su programa espacial, informó este martes la Agencia Telegráfica Central de Corea del Norte citada por AFP.
El Consejo de Seguridad de la ONU condenó anteriormente el lanzamiento de un cohete norcoreano con uso de tecnologías balísticas realizado la semana pasada y exigió que Pyongyang observara la moratoria sobre las pruebas de misiles. Sin embargo, las autoridades norcoreanas siguen planeando poner en órbita un satélite artificial de fabricación nacional.
Según el ministro de Asuntos Exteriores del país, las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU impuestas sobre Corea del Norte “violan el derecho de cualquier país a lanzar un satélite artificial”.
El lanzamiento del cohete Unha-3 realizado el pasado viernes, 13 de abril, con el objetivo de poner en órbita el satélite Kwangmyongsong-3 para conmemorar el centenario del nacimiento del fundador del país, Kim Il-sung, resultó fallido. El cohete se desintegró en el aire en los primeros minutos del vuelo.
La comunidad internacional condenó el lanzamiento del cohete, teniendo en cuenta las dos resoluciones existentes del Consejo de Seguridad de la ONU que exigen cese de pruebas nucleares y de misiles en Corea del Norte.
Corea del Norte se declaró potencia nuclear en 2005. En 2006 y 2009, el país asiático realizó pruebas nucleares, lo que provocó protestas de Occidente además de la aprobación de varias resoluciones del Consejo de Seguridad para que Pyongyang suspenda sus actividades nucleares.
Las resoluciones 1718 y 1874 del Consejo de Seguridad de la ONU, exigen además a Corea del Norte suspender sus pruebas nucleares y lanzamientos de misiles balísticos. Pyongyang asimismo debe abandonar sus planes de poseer armas nucleares y volver a las negociaciones sobre la desnuclearización de la península de Corea.
Las conversaciones a seis bandas sobre el problema nuclear de la Península coreana en las que participan Corea del Norte y Corea del Sur, China, Rusia, EEUU y Japón comenzaron en 2003 pero se vieron estancadas a finales de 2008.
