Científicos descubrieron que los microrganismos que forman parte del plancton pueden saltar del agua hasta una altura considerable, dice un artículo publicado en la revista Proceedings of the Royal Society B y resumido en ScienceNOW.
En particular, fueron estudiados los Anomalocera ornata y los Labidocera aestiva, unos copépodos considerados relativamente grandes. Los cuerpos de sus ejemplares adultos medir algunos milímetros.
Las cámaras grabaron su conducta en situaciones cuando estaban cerca a organismos capaces de devorarlos. Los científicos establecieron que los A.ornata pueden volar a distancia de hasta 17 centímetros, o decenas de veces más grande que sus cuerpos. El vuelo, de hasta 0,66 metro por segundo, permitió salvarse a 88 de los 89 especímenes observados.
Los L.aestiva mostraron la capacidad de utilizar con eficacia la energía al dar saltos. Esos copépodos logran abandonar la superficie acuática de un salto, gastando un 88% de la energía para superar la línea divisoria entre los dos medios. Durante el vuelo giran con mucha velocidad, de hasta 7.500 revoluciones por minuto.
Los estudios realizados permitieron hacer la conclusión de que no es correcta la noción del plancton como un conjunto de organismos microscópicos pasivos.
A pesar de que el plancton es llevado por la corriente, en su interior “bulle una vida muy dinámica”, señalan los científicos.
