La solemne despedida de un pequeño cocodrilo cubano en peligro de extinción, conocido en Italia como “el cocodrilo del Papa”, se celebró este miércoles en el parque zoológico de Roma, informó el corresponsal de RIA Novosti en esta ciudad.
El pasado mes de enero, empleados del Bioparco enseñaron al Papa Benedicto XVI este animal, confiscado en el norte de Italia a un ciudadano que lo introdujo ilegalmente. El reptil, de la especie en extinción Crocodylus rhombifer y que mide apenas 30 centímetros, le agradó al Pontífice, por lo que la prensa le pegó la etiqueta del “cocodrilo del Papa”.
Gracias al equipo veterinario del Bioparco, el cocodrilo adquirió buena forma en los últimos meses y podrá regresar ahora a Cuba. Este viaje de vuelta será costeado por donativos particulares y el dinero recaudado en “La noche del cocodrilo”, un programa de eventos especiales organizado en el Zoológico de Roma.
La devolución se produce en vísperas de la visita papal a la isla caribeña, programada para el 26-28 de marzo. A la ceremonia de despedida asistió hoy el arzobispo Giovanni Angelo Becciu, ex nuncio en La Habana y sustituto para la Secretaría de Estado de la Santa Sede.
La población del Crocodylus rhombifer, cuyo hábitat se limita a la Isla de la Juventud, es de apenas 5.000 ejemplares. Este cocodrilo figura en el Libro Rojo de las especies en peligro de extinción.
