El presidente de Rusia, Dmitri Medvédev, afirmó este jueves que las recientes declaraciones sobre el escudo antimisiles en Europa no fueron parte de la campaña electoral de cara a las próximas legislativas, sino una medida sopesada a la que Rusia fue forzada.
“Las declaraciones no tienen ningún carácter táctico ni mucho menos electoral, tal como las valoran algunos representantes de la oposición. Fueron declaraciones ponderadas y, para ser sincero, de hecho me forzaron a hacerlas”, declaró Medvédev durante una reunión con electores.
Recordó que ha sostenido últimamente numerosos entrevistas con responsables de la OTAN para analizar la posible creación de un sistema única de seguridad en Europa que incluya defensa antimisiles.
“Tras la cumbre Rusia-OTAN en Lisboa, cité con toda idea al presidente de Estados Unidos. Nos encerramos en un cuarto pequeño y le dije: “Mira, Barack, tendremos que responder a eso (escudo antimisiles), si en un plazo razonable vosotros no dais ningún paso a favor de Rusia ni respondéis a nuestras preocupaciones”, reveló el líder ruso.
Según advirtió Medvédev, la configuración del escudo antimisiles propuesta es, en opinión de los expertos militares rusos, “realmente puede perjudicar la paridad estratégica que se mantiene actualmente en el mundo y las relaciones surgidas últimamente, incluido el Tratado START”.
El pasado 23 de noviembre, el presidente ruso hizo un discurso dedicado al problema del escudo antimisiles que EEUU pretende desplegar en Europa. Entre otras medidas de respuesta, Medvédev anunció el despliegue del sistema de misiles Iskander en la provincia de Kaliningrado, enclave ruso entre Lituania y Polonia.
