La policía de Oakland, California, arrestó a 85 personas durante una operación para dispersar a manifestantes del movimiento “Ocupar Wall Street” que mantenían un campamento en una plaza central de la ciudad.
Las detenciones tuvieron lugar la madrugada del martes en la plaza central de Oakland frente al ayuntamiento local, donde manifestantes por segunda semana consecutiva protestaban contra la política de los gigantes financieros del país durante la recesión económica.
La policía antimotines de Oakland confirmó el arresto de varias personas y dijo que se vio forzada a utilizar gas lacrimógeno para hacer frente a las piedras y botellas que les lanzaban los manifestantes pero que ninguna de las cerca de 350 personas acampadas resultó herida en el operativo.
Los arrestados podrían ser acusados de haber instalado un campamento en un espacio público sin la autorización previa de las autoridades, indicó la policía.
Funcionarios de la alcaldía de la ciudad, declararon que desde el jueves pasado, 20 de octubre, habían pedido a los manifestantes no pernoctar en la plaza ocupada por ellos, donde además cocinaban comida.
Las autoridades expresaron preocupación por el riesgo de aparición de ratas en la zona del campamento, insalubridad y la posibilidad de un incendio debido al manejo de fuego en el lugar.
Además, la alcaldía aseguró contar con información sobre casos de vandalismo y abusos sexuales dentro del campamento.
Las protestas contra la situación económica en el país empezaron el pasado 17 de septiembre en el centro financiero de EEUU, Nueva York.
En la actualidad, lo que empezó con una sentada de unas 500 personas en un parque público en el corazón de Manhattan, está recabando día a día nuevos apoyos en ciudades tan importantes como Los Ángeles, Miami, Nueva Jersey y Washington.
Las acciones de rebeldía que siguen creciendo en las ciudades de los Estados Unidos tienen, en su mayoría, un carácter pacifico, a pesar de que la policía usa la fuerza.
En cada ciudad, el lema cambia. Así, por ejemplo, en Boston las manifestaciones tienen el nombre “Ocupa Boston”, en Chicago, el movimiento se llama “Levántate Chicago”.
Los reclamos de los manifestantes en todo el país son similares, repudio a la "avaricia corporativa", solución al desempleo y fin a las corporaciones financieras más importantes de EEUU responsables del empeoramiento de la crisis económica en el país.
