Las bolsas asiáticas abrieron en negativo este jueves tras la caída de los principales índices en Europa y EEUU.
El índice surcoreano KOSPI bajó un 4%; el nipón Nikkei 225, un 1,79%; el hongkonés Hang Seng, un 2,35%; y el chino SSE Composite, un 1,33%.
Estos números rojos reflejan la caída que sufrieron al cierre del miércoles las bolsas europeas y estadounidenses. Los mercados de Milán, Fráncfort, París y Madrid registraron descensos de más del 5%. Los bancos franceses Société Générale SA y BNP Paribas perdieron un 10-20%. También bajaron los índices bursátiles en EEUU: el DJIA, un 4,62%; el NASDAQ, un 4,09%; y el S&P 500, un 4,42%.
Kevin Caron, analista de Stifel Nicolaus & Co., señaló en una entrevista con Bloomberg que “en el mercado hay preocupación por la industria, los bancos se encaran con una economía en proceso de deterioro, la crisis de la deuda en Europa plantea toda una serie de asuntos y la inquietud a corto plazo es que el efecto de todo ello se vaya propagando”.
También influyó en los inversores la noticia de que almacenes mayoristas de EEUU, según la Oficina de Censos del Departamento de Comercio estadounidense, incrementaron sus existencias un 0,6% el pasado mes de junio, cuatro décimas por debajo de lo que vaticinaban los expertos consultados por el portal dailyFX.com.
Los futuros del crudo WTI y Brent con entrega en septiembre bajaron en la bolsa electrónica de Nueva York un 0,72% y un 0,67%, respectivamente, hacia las 3.44 GMT de este jueves.
“Es un juego de confianza”, explicó a Bloomberg Jonathan Barratt, director gerente de la empresa Commodity Broking Services en Sídney. La gente, según él, prefiere mirar hacia el mercado de valores y no reparó en que la reserva comercial del petróleo en EEUU, de acuerdo con el Departamento de Energía, disminuyó en un 0,7% la semana pasada.
