Oleada de violencia se cobra al menos 24 víctimas en Karachi

Al menos 24 personas murieron el pasado domingo y este lunes en el tiroteo entre milicias de diverso origen étnico en Karachi, la ciudad más poblada de Pakistán, informaron fuentes policiales citadas por la televisión Aaj TV.

Diversos barrios de la ciudad fueron escenario de reyertas armadas en las últimas veinticuatro horas. Muchas tiendas de Karachi, que es el principal centro comercial y financiero de Pakistán, permanecen cerradas hoy, la gente tiene miedo de abandonar sus casas y en las calles se ven patrullas armadas.

Sin embargo, la prensa destaca que la situación aún presenta pocos visos de mejora. Las autoridades locales insisten en mantener en vigor su reciente normativa que prohíbe a motoristas llevar pasajeros en su vehículo (a excepción de mujeres y ancianos) debido a la proliferación de atentados en que extremistas sentados detrás del conductor empiezan a disparar contra la gente.

Karachi vive últimamente una oleada de ajustes de cuentas entre grupos criminales y facciones políticas  rivales. A menudo se trata de enfrentamientos entre militantes del Partido Popular Nacional (Awami), que representa a los pastunes, y los del Movimiento Nacional Unido (Muttahida, o MQM), que agrupa a los ‘mohajir’, refugiados urdus de religión musulmana venidos de la India tras la partición de la antigua colonia británica en 1947 y sus descendientes.

Los ‘mohajir’ reprochan a los pastunes los intentos de controlar con métodos mafiosos los comercios y las obras públicas en Karachi, así como el hecho de simpatizar con la ideología radical de los talibanes. Por su parte, los pastunes se sienten discriminados por motivos étnicos a la hora de buscar un empleo o una vivienda decentes.