El nivel de contaminación en lugares destinados a no fumadores en sitios públicos de Moscú, supera en 4,5 veces la norma establecida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), informó hoy el ministerio de Salud de Rusia.
En abril y mayo del año en curso la cartera de Salud y Desarrollo Social verificó la calidad del aire en los lugares públicos de la ciudad de Moscú. Los resultados confirman que la gente que visita las cafeterías y restaurantes, así como el personal de los mismos, se expone a los efectos del humo de tabaco.
“El ambiente en lugares con un alto nivel de contaminación del aire por el humo de tabaco influye considerablemente no solo en la salud de las personas que visitan sino de las que trabajan en las cafeterías y restaurantes”, informó el servicio de prensa de la cartera de Salud rusa.
El humo de tabaco aumenta en un 60% la probabilidad de sufrir una enfermedad cardiovascular; y de cáncer de pulmón, en un 22-23%, añadió la cartera rusa.
Muchas personas que visitan los lugares públicos llegan con menores de edad que involuntariamente se convierten en fumadores pasivos, apuntaló la entidad.
De acuerdo a la encuesta especializada para fumadores GATS hecha a la población adulta, al menos 43,9 millones de rusos son fumadores, y casi el 35% de la población está expuesta a los efectos del humo de tabaco en sus lugares de trabajo; mientras que el 90,5% se convierten en fumadores pasivos en los bares; y en los restaurantes, el 78,6%.
El ministerio de Salud de Rusia puso en marcha hoy una campaña denominada “31 de mayo: Día del rechazo al tabaco” en ocasión al Día Mundial sin Tabaco, promulgado en 1988 en la 42 sesión de la Asamblea Mundial de la Salud que se celebra todos los 31 de mayo.
