Médicos alemanes reportaron dos muertes por el brote de la bacteria intestinal Escherichia coli y su cepa O157:H7, en el norte del país, informó hoy el canal Т-24.
Entre las fallecidas por la infección se encuentran una mujer joven y una jubilada de 83 años.
Según fuentes sanitarias, hay más de 130 casos registrados y unas 40 personas se encuentran hospitalizadas en estado grave.
“El número de casos graves en un período de tiempo tan reducido es inusual, también llaman la atención los grupos de edad de los enfermos”, informaron en el Instituto Robert Koch, especializado en investigación de enfermedades infecciosas.
La bacteria que puso en alerta a uno de los países más industrializados del mundo puede causar diarreas, insuficiencia renal, daños vasculares y anemia. Mientras, la última etapa de la infección se caracteriza por hemorragias intestinales.
La mayor parte de las personas infectadas hasta la fecha son mujeres de mediana edad. Aunque los niños también se encuentran en el grupo de mayor riesgo de contraer la infección.
Según una de las hipótesis el origen del brote puede radicar en la ingesta por parte de los enfermos de productos lácteos o carnes semicrudas, ya que la cocción de los alimentos mata inmediatamente la bacteria.
