El jefe del Centro de Preparación de Cosmonautas Gagarin, Serguei Krikaliov, confirmó hoy que existen planes de diseñar nuevos trajes para los cosmonautas, pero dijo que Ana Chapman, conocida como “espía rusa”, no figura entre quienes se ofrecieron para realizar ese proyecto.
“Unos grupos de personas ya acometieron el desarrollo de nuevos trajes para los cosmonautas y lo hacen de modo autónomo. Pero Ana Chapman no figura entre ellos, que yo sepa”, señaló.
Chapman fue arrestada en EEUU en junio de 2010, junto con otros diez ciudadanos de Rusia, como presunta espía. Más tarde a todos ellos los canjearon en Viena por unos rusos que cumplían castigo en territorio de Rusia.
Chapman figuró en muchas publicaciones a raíz de ese escándalo de espionaje, pero la prensa comentó mucho también su atractivo físico.
La muchacha registró su nombre como marca comercial en 2010. Su licencia regirá hasta el año 2020. Desde ahora el apellido Chapman puede aparecer en muchas mercancías, desde perfumes hasta alcohol.
En octubre pasado, Ana viajó al cosmódromo Baikonur, Kazajstán, para saludar a la tripulación ruso-estadounidense de la nave Soyuz TMA-M y desearle feliz vuelo.
