La Unión Europea llamó ayer a todas las fuerzas políticas de Albania a mantener la calma y evitar las provocaciones después de que los choques entre los manifestantes y la Policía causaran al menos tres muertos y 40 heridos en Tirana, la capital de esta nación del sureste de Europa.
La jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, y el comisario europeo de la Ampliación, Stefan Füle, emitieron un comunicado conjunto exhortando a los políticos albaneses a entablar “diálogo constructivo” y “movilizar los esfuerzos” para “resolver con urgencia la enconada situación política en el país”.
Unos 20.000 partidarios del opositor Partido Socialista se congregaron la víspera en el centro de Tirana para exigir la dimisión del actual Gabinete de Sali Berisha y la convocatoria anticipada de elecciones generales. La protesta derivó en desórdenes cuando varios centenares de manifestantes se separaron de los demás, prendieron fuego a varios coches y empezaron a arrojar piedras contra los policías que respondieron, a su vez, con gas lacrimógeno y carros lanzaaguas.
Los socialistas acusan al Gobierno de haber manipulado el resultado de las elecciones generales de 2009, en las que el Partido Democrático, actualmente en el poder, obtuvo la victoria con una ventaja mínima. Las siguientes elecciones locales están previstas para mayo de 2011, y las parlamentarias, para 2013.
