El italiano Darсo Sangermano, víctima de fuegos artificiales, salva su vida, con un estornudo

Durante la celebración de Año Nuevo, en Nápoles, el italiano Darсo Sangermano, de 28 años, fue víctima de un accidente con fuegos pirotécnicos, cuando una partícula de pólvora le entró en la sien, sin embargo, tras un estornudo, la pizca se salió de su cabeza con lo que salvó su vida, escribe hoy  la revista Gente citada por The Telegraph.

Según el rotativo, la partícula tras entrar por la parte derecha de la cabeza, detrás de la órbita, se atoró en el conducto nasal. Con una fuerte hemorragia, Sangermano, fue llevado al hospital en las primeras horas del 2011 y mientras aguardaba para recibir asistencia médica, el hombre estornudó y la partícula se salió simplemente a través de la narina derecha.

El doctor Guillermo Ramieri, que atendió el caso, dijo que "la partícula de los fuegos artificiales rompió el hueso temporal cerca de la sien misma y que esto frenó la velocidad del movimiento del átomo, lo que permitió evitar el impacto directo en el globo ocular”.

Sangermano, tuvo que pasar una larga operación de ojo para que le sacaran los trozos del hueso afectado. De acuerdo con los cirujanos, “el hombre no perderá la vista pero en lo sucesivo se enfrentará a una intervención láser para restablecer la retina".

Los fuegos artificiales desde hace mucho, provocan recelos en los médicos. Por ejemplo, en Asia, donde ni una celebración de Año Nuevo  pasa sin una "lluvia de fuego", las quemaduras son las lesiones más difundidas en el período de fiesta. Los especialistas, incluso rusos, aconsejan respetar todas las reglas de seguridad o negarse en absoluto a los fuegos artificiales.