El presidente de Rusia, Dmitri Medvédev declaró hoy que el cuidado de la infancia será la tarea más importante del país, al intervenir en su discurso anual a la Asamblea Federal (ambas cámaras del parlamento) en ceremonia especial en el Kremlin.
“Una sociedad que defienda los derechos del niño y respete su integridad moral no sólo es más humana y bondadosa sino que también se desarrolla con más dinamismo y tiene perspectivas más concretas”, subrayó Medvédev.
Subrayó que la modernización del país impulsada por su gobierno antes que todo se hace en aras de las generaciones futuras.
“Al ocuparnos del país que dejaremos a nuestros hijos y nietos, también es de vital importancia preocuparnos de aquellos que asumirán el destino de Rusia. Los 26 millones de niños y adolescentes que viven en nuestro país deben crecer sanos y felices y convertirse en ciudadanos dignos. Esta debe ser la tarea número uno para todos nosotros”, resaltó el presidente ruso.
Al explicar su estrategia social, el líder ruso dijo que en Rusia no debe haber niños huérfanos, y que el objetivo de las entidades de protección infantil debe ser encontrar familias que adopten esos niños y ampliar las ayudas sociales a los padres adoptivos.
“Desafortunadamente en el país viven 130.000 niños sin hogar, sin padres o tutores y carecen de los más importante, el calor familiar” dijo Medvédev.
El líder ruso expuso un plan para favorecer la maternidad y la protección infantil a partir de la ampliación de la asistencia médica, la apertura de más jardines infantiles, escuelas y programas de estímulo para las familias con hijos.
Al respecto, indicó que el gobierno debe adoptar una política de ayuda social preferencial para las familias numerosas y estímulos concretos que incentiven a las parejas jóvenes tener más hijos.
“Para las familias con tres o más hijos menores de edad deben tener derecho a regalías tributarias complementarias y subsidios estatales en particular aumentar hasta 3.000 rublos la dotación por cada hijo a partir del tercero”, dijo Medvédev.
También se manifestó a favor de la concesión gratuita de parcelas de tierra y subsidios para la construcción de casas campestres (dachas) para las familias con más de tres hijos.
Medvédev también anunció la pronta aprobación de una ley que castigará penalmente la venta de bebidas alcohólicas a menores de edad, y la adopción de programas para promover hábitos de vida sana entre la población.
“A nuestra sociedad le llegó el momento de superar su postura simplista en cuanto a los hábitos de vida sana”, dijo Medvédev al recordar que le 80 % de la población no hace ejercicio ni deportes, y que por el número de fumadores, Rusia se encuentra entre los primeros países del mundo.
