El artefacto sospechoso detectado en la capital de Namibia, Windhoek, a bordo de un avión con destino a Múnich era un simulacro de prueba, aseguró hoy el titular del Ministerio del Interior de Alemania, Thomas de Maiziére.
Según De Maiziére, la presunta bomba, que pertenece a un fabricante estadounidense de sistemas de alarma, fue colocada en una maleta para poner a prueba el dispositivo de seguridad.
“Expertos de la policía criminal alemana examinaron el paquete hallado en el lugar de los hechos. Se trató de una prueba realizada en condiciones casi reales”, explicó.
El ministro germano subrayó que el paquete no contenía explosivos y que “en ningún momento” las vidas de los pasajeros corrieron peligro.
La maleta con el artefacto sospechoso fue detectada en el aeropuerto de Windhoek entre el equipaje de un avión de la aerolínea LTU/Air Berlin que iba a realizar un vuelo chárter a Múnich. Aunque el hallazgo se produjo el pasado miércoles, se hizo público sólo un día después.
El mismo miércoles, de Maiziére anunció que se extremaban las medidas de seguridad debido a nuevas amenazas de atentados por parte de grupos de islamistas radicales. En particular, se reforzó la presencia policial en los aeropuertos y estaciones ferroviarias.
A finales de octubre, en el aeropuerto East Midlands, al norte de Londres, y en un almacén de Dubai se hallaron paquetes con explosivos que, según revelaron las pesquisas, se habían enviado por un mismo remitente de Yemen y tenían como destino una asociación de judíos de Chicago (Estados Unidos).
La presunta bomba del vuelo de Namibia a Alemania fue solo una prueba de seguridad
15:22 GMT 19.11.2010 (actualizado: 17:31 GMT 10.12.2014)
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El artefacto sospechoso detectado en la capital de Namibia, Windhoek, a bordo de un avión con destino a Múnich era un simulacro de prueba, aseguró hoy el titular del Ministerio del Interior de Alemania, Thomas de Maiziére.
