La multinacional farmacéutica suiza Novartis AG desarrolla una nueva generación de pastillas inteligentes, “chip-in-a-pill”, que tendrán incorporado un micro chip para controlar los efectos sobre el paciente, escribe hoy la prensa internacional.
Activado por el ácido gástrico, el chip va a transmitir la información a un parche especial pegado a la piel del paciente que, a su vez, podrá reenviarla por Internet o a través de un teléfono inteligente.
Novartis espera recibir en los próximos 18 meses las aprobaciones necesarias para dar el paso siguiente e iniciar las pruebas con un fármaco que suele recetarse tras trasplante de riñón u otros órganos, para prevenir el rechazo. En estos casos hace falta con frecuencia reajustar la dosis.
A la larga, la empresa suiza planea extender el mismo concepto a otras píldoras y usar los datos biométricos, tales como fiebre o ritmo cardíaco, para comprobar que los fármacos surten el efecto necesario.