Moscú, 21 de junio, RIA Novosti. La celebración de una consulta popular en Kirguizistán, donde el pasado 10 de abril se registraron violentos enfrentamientos étnicos, puede evitar nuevos brotes de violencia, afirmó hoy la presidenta del Gobierno provisional de la república centroasiática, Rosa Otunbáyeva.
"Es nuestra obligación convocar un referéndum, si no el país se verá envuelto en nueva ola de disturbios", dijo Otunbáyeva en una entrevista al periódico ruso "Izvestia".
Según la jefa del Ejecutivo interino, las autoridades sopesaron todos los "pros" y los "contras" de la mencionada decisión.
"No tenemos otro camino que el que va hacia adelante. Es como en el sumo (lucha libre japonesa), si das un paso hacia atrás, te echan del ring", dijo Otunbáyeva.
Los choques entre kirguíses y uzbekos comenzaron la noche del pasado 10 de junio en Osh, segundo en importancia centro regional de Kirguizistán. Estos brotes de violencia étnica, los más graves en los últimos 20 años, se extendieron al poco tiempo a la vecina región de Jalal Abad dando origen a disturbios públicos, incendios, pogromos y merodeo.
Disturbios en Kirguizistán. Infografía 
Así, en Osh fueron incendiados un total de 168 locales, incluidos casas de viviendas.
Según datos oficiales, los recientes enfrentamientos étnicos en Kirguizistán dejaron un saldo de 208 muertos, 2.101 heridos y más de 80.000 refugiados.
El referéndum estará encaminado a legitimar el poder del Gobierno interino, y aprobar la nueva Carta Magna que transformará el país en una república parlamentaria.
