Moscú, 26 de marzo, RIA Novosti. La llamada Circulación Meridional de Retorno del Atlántico no se ha ralentizado en lo últimos 15 años, como se creía antes, sino que incluso se ha acelerado, afirma un estudio publicado por la revista Geophysical Research Letters.
"Los cambios de la velocidad del movimiento de las aguas que observamos son, con toda probabilidad, parte de un ciclo natural. La aceleración de las corrientes desde 1993 coincide con el ciclo natural de calentamiento y enfriamiento del Atlántico que dura decenas de años", explicó Josh Willis, del Laboratorio de Propulsión de la Nasa y responsable del estudio.
Mediante una nueva técnica de observación, Willis calculó la velocidad de las corrientes cerca de la latitud 41º, aproximadamente entre Nueva York y la parte norte de Portugal, demostrando que no sufrió variaciones entre 2002 y 2009 y que incluso se aceleró un 20% desde 1993.
El investigador realizó su estudio a partir de datos aportados por los altímetros de satélite de la NASA y por el programa internacional Argo que cuenta con unos 3.000 perfiladores robóticos fondeados en profundidades oceánicas de hasta 2.000 metros.
Se trata de la misma técnica que el científico empleó en 2008 para comprobar el calentamiento de agua en los océanos y que, en su opinión, complementará la metodología actual de la observación de las corrientes del Atlántico que se consideran uno de los factores clave que regula la temperatura y la cantidad de precipitaciones en las regiones adyacentes.
La Circulación Meridional de Retorno del Atlántico (AMOC, por sus siglas en inglés) es un importante sistema de corrientes responsable del clima actual de Europa, Norteamérica y África, que sería mucho más fresco sin las corrientes cálidas de la AMOC.
Hasta ahora, se creía que el calentamiento global y el consiguiente deshielo de los glaciales ralentizan las corrientes del Atlántico, amenazando con un enfriamiento en los tres continentes.
Según Willis, incluso con una ralentización de la AMOC, no vale la pena temer de consecuencias notables para el clima global.
