México, 17 de marzo. RIA Novosti. El presidente de México, Felipe Calderón, pidió la víspera a Estados Unidos responsabilidad compartida en el combate contra el crimen organizado mexicano, causante de miles de muertes en la fronteriza Ciudad Juarez.
"Es indispensable que el combate al crimen organizado se asuma plenamente como una responsabilidad compartida entre Estados Unidos y México (...) cada quien en su territorio y cada quien en el ámbito de su competencia", sostuvo el mandatario mexicano en un acto público en Ciudad Juárez, la localidad más violenta de México.
La visita de Calderón a Ciudad Juárez tuvo lugar tres días después de que en esta urbe fueran asesinados una funcionaria del Consulado estadounidense y su esposo, también norteamericano, y, en un ataque casi simultáneo, un mexicano casado con otra empleada consular.
En presencia del embajador estadounidense Carlos Pascual, el mandatario mexicano aseguró que la violencia que azota a Ciudad Juárez tiene su origen en "fenómenos que afectan a ambos países (...) como son el consumo y el tráfico de drogas en y hacia Estados Unidos" y las armas que desde ese país ingresan a México.
Según expertos, los ingresos del crimen organizado, provenientes del tráfico de drogas hacia EEUU, ascienden a decenas de miles de millones de dólares.