Varsovia, 15 de diciembre, RIA Novosti. La policía polaca liberó el tren que hoy tomó por la fuerza un grupo de 230 refugiados extranjeros deseosos de viajar a Estrasburgo (Francia) para quejarse de las condiciones de vida en los centros para refugiados, comunicó una portavoz de los servicios fronterizos de Polonia.
"Los agentes no emplearon la fuerza ni equipos especiales para hacer bajar a los refugiados porque en el tren había 60 niños", subrayó la portavoz.
Según las primeras informaciones, en el tren viajaban ciudadanos de Georgia y Rusia (oriundos de Chechenia y de Ingushetia). El tren estaba parado ante la frontera con Alemania.
Comentó que los detenidos fueron trasladados a un departamento de vigilancia de fronteras en el poblado de Zgorzelec (parte occidental de Polonia) donde se levantará actas sobre la infracción del régimen fronterizo.
"Ese procedimiento ocupará bastante tiempo porque son 230 personas, que después serán trasladadas a los centros polacos para refugiados donde estaban alojados antes", agregó.
Los ciudadanos de Georgia y de Rusia, que tomaron por la fuerza el tren, aún no habían recibido el estatuto de refugiados y exigían que les otorgaran esa condición lo más pronto posible y que les dieran una comida mejor.
