Moscú, 3 de agosto, RIA Novosti. El danés Anders Fogh Rasmussen, quien empezó a trabajar hoy como nuevo secretario general de la OTAN, se pronunció por sacar adelante la cooperación con Rusia que se mantiene congelada después de la guerra ruso-georgiana de agosto de 2008.
"Las discrepancias que mantenemos no deberían deteriorar nuestras relaciones", afirmó Rasmussen al ofrecer su primera rueda de prensa en calidad de jefe de la OTAN.
Ambas partes tienen intereses comunes en lo que respecta a la seguridad global, subrayó Rasmussen al agregar que intentará "convencer a la población y a la cúpula política rusas de que la OTAN no es una enemiga" y que "no apunta contra Rusia".
Este político de 56 años, ex primer ministro de Dinamarca, precisó que la OTAN seguirá desarrollando la operación de paz en el territorio de Afganistán. "Vamos a permanecer allí el tiempo que sea necesario", aseguró Rasmussen, quien sustituye en el cargo al holandés Jaap de Hoop Scheffer.
También se declaró dispuesto a continuar durante su mandato la política de ampliación de la OTAN. Al mismo tiempo, reconoció que dos naciones postsoviéticas que aspiran a integrarse en la alianza, Georgia y Ucrania, todavía no están preparadas para la admisión.