Moscú, 18 de marzo, RIA Novosti. La realización del proyecto de construcción del gasoducto europeo Nabucco no llevaría a solucionar los problemas de seguridad energética de Europa, declaró hoy a los periodistas Konstantín Kosachov, presidente del comité para asuntos internacionales del parlamento de Rusia.
El proyecto Nabucco, valorado en 7.300 millones de dólares, sería continuación de la tubería Bakú-Tbilisi-Erzurum, ya tendida hacia Turquía, y permitiría transportar unos 20.000-30.000 millones de metros cúbicos de gas al año. Las negociaciones en torno a ese proyecto se sostienen desde hace más de un año y se intensificaron a comienzos de 2009, tras surgir el conflicto de gas ruso-ucraniano. Como potenciales suministradores de gas para Nabucco se señalan Azerbaiyán, Irán, Turkmenistán e Iraq. La víspera, la Unión Europea no logró llegar a un acuerdo con ellos en el tema de financiación y se vio obligada a bajar el grado de prioridad a ese proyecto.
"No veo ninguna sorpresa en ello. Desde el comienzo mismo estaba claro que a ese proyecto le falta una sana base económica y su realización puede resultar no rentable", dijo Kosachov.
Según él, el problema podría solucionarse coordinando una estructura mutuamente aceptable con los Estados productores de hidrocarburos, en primer lugar con Rusia, una estructura que neutralice el papel destructor que pueden jugar los países de tránsito.
El parlamentario sostiene asimismo que los proyectos rusos North Stream y South Stream presentan la única perspectiva real de desarrollo del diálogo entre Rusia y Europa en materia de seguridad energética.
