Moscú, 15 de enero, RIA Novosti. El presidente de Ucrania, Víctor Yúschenko, declinó hoy la invitación de su homologo ruso Dmitri Medvédev de asistir a una cumbre de países consumidores y de tránsito de gas el próximo sábado en Moscú, y como alternativa a la iniciativa rusa, propuso celebrar una reunión similar en un país de Europa.
"El líder ucraniano confirmó su asistencia a una cumbre, pero únicamente si se celebra en el territorio europeo", comentó el servicio de prensa una conversación sostenida entre Yúschenko y la canciller alemana Angela Merkel.
En sintonía con Yúsehnko, la primera ministra de Ucrania, Yulia Timoshenko, apoyó la idea de celebrar una cumbre de países consumidores y transportistas de gas ruso, pero subrayó que ese evento debería celebrarse en un país que no esté involucrado directamente en el conflicto ruso-ucraniano de gas.
"Quisiéramos que tal cumbre se celebre en la capital de cualquier país europeo para tener una base para negociaciones libres", dijo la primera ministra ucraniana al término del encuentro la víspera con su homólogo búlgaro, Sergei Stanishev.
Pese al declarado boicot ucraniano, el Kremlin confirmó que Moscú ha puesto en marcha los preparativos para recibir a los jefes de estados y de gobierno que acepten la invitación anunciada por Medvédev el pasado miércoles.
"Por los canales diplomáticos, estamos dando curso a las invitaciones a los jefes de Estado y de Gobierno de los países consumidores y transportadores del gas ruso", indicó la portavoz del Kremlin Natalia Timakova.
A juicio de expertos, la celebración de la cumbre podría servir de marco legal a la adopción de decisiones políticas que permitan solucionar el conflicto ruso ucraniano del gas, que cada día empeora y puede compararse a un callejón sin salida.
El consorcio energético ruso Gazprom, responsable del las exportaciones de gas ruso informó que su contraparte ucraniana, la empresa Naftogaz, por tercer día consecutivo volvió a rechazar la petición formal para el tránsito del gas ruso hacia Europa.
Gazprom solicitó la madrugada del jueves el transporte de 99,2 millones de metros cúbicos a Moldavia, Eslovaquia y países balcánicos a través de las estaciones de bombeo ucranianas Sudzha y Orlovka, pero Kiev respondió nuevamente con una negativa alegando la ausencia de un acuerdo técnico para 2009 que especifique las condiciones de entrega y recepción del carburante en los puntos fronterizos.
Para Gazprom, la negativa ucraniana es un pretexto forzoso porque existe un convenio bilateral vigente sobre el tránsito del gas ruso vía Ucrania en 2003-2013, y, también porque Naftogaz el año pasado año recibió el carburante ruso y lo bombeó hacia Europa sin tener ningún acuerdo técnico.
Desde que Gazprom reanudó los suministros de gas a Europa el pasado martes mantiene abiertas las espitas en su gasoducto conectado con la estación ucraniana a través de Sudzha pero Ucrania impide la entrada del hidrocarburo en su territorio.
Por otra parte, el primer ministro ruso, Vladimir Putin, declaró que el presupuesto nacional no ha sido afectado considerablemente a pesar de las pérdidas económicas sufridas por el consorcio Gazprom como consecuencia de la crisis del gas.
"El aporte al tesoro público no es pequeño, pero tampoco es tan grande como les parezca inicialmente. El sector petrolero da alrededor del 40% de los ingresos para el presupuesto; mientras que Gazprom, algo del 4-5%", dijo el primer ministro en una entrevista para el canal de televisión alemana ARD.
No obstante, Putin resaltó que los problemas del consorcio repercuten en la economía porque, "soporta una carga social bastante grande: el subsidio de la economía vendiendo gas al consumidor nacional a bajos precios y gasificar las regiones rusas", subrayó.
Según el primer ministro, en los últimos tres años la gasificación de los poblados del 54% aumentó al 62% y el presente año Gazprom destinará al menos 18.500 millones de dólares para la gasificación de otras regiones del país.
Entre tanto, el servicio de prensa del gobierno ruso confirmó informaciones procedentes de Kiev sobre un encuentro entre Putin y Timoshenko en Moscú, el próximo sábado, para tratar el asunto de los suministros de gas para Ucrania.
De acuerdo a un comunicado del Ejecutivo ucraniano, Timoshenko y Putin, en conversación telefónica sostenida en la noche del miércoles al jueves, acordaron celebrar las negociaciones sobre el tema de gas en Moscú.
"Durante la plática las partes alcanzaron el acuerdo de celebrar las conversaciones sobre el asunto gasístico en Moscú el próximo sábado en el nivel de Gobiernos. Además, se discutieron los procedimientos generales para resolver todos los problemas, relacionados con el gas", indicaron las fuentes ucranianas.
Timoshenko y Putin también discutieron las condiciones de inicio de trasiego de gas ruso a Europa. La primera ministra ucraniana envió a su homólogo ruso un telegrama urgente en el que garantizó que todo el gas bombeado por Rusia en la red de gasoductos ucranianos llegará a los clientes europeos a excepción del 8% que se utilizará para fines tecnológicos.
Además, Timoshenko prometió pagar por el gas utilizado con fines tecnológicos inmediatamente después de que sea fijado el precio del gas ruso para Ucrania.
"El diálogo de los primeros ministros resultó constructivo lo que infunde la esperanza en el arreglo pronto de todos los problemas gasísticos. Timoshenko considera posible llegar a una fórmula de compromiso", concluyeron las fuentes.
Por otra parte el ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania confirmó la intención de su país de ampliar y profundizar la cooperación con Estados Unidos para la modernización del sistema nacional de gasoductos.
La Carta de Cooperación Estratégica firmada por ambos países señala que "las partes planean cooperar estrechamente con el objetivo de restablecer y modernizar las capacidades de la infraestructura ucraniana del transporte del gas", así como en las tareas de "diversificación", recordó este jueves Vasili Kirílich, portavoz de la cancillería ucraniana.
El pasado miércoles, el viceministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Konstantín Yeliséyev, admitió que su país necesita 2,5 mil millones de euros para modernizar la red nacional de gasoductos e incrementar su capacidad del transporte.
