Roma, 1 de abril, RIA Novosti. El Gobierno de Italia pagará 20 millones de euros a título de compensaciones para las compañías que producen mozarella, cuya fabricación cesará provisionalmente, con el fin de realizar análisis de contenido en ese queso de la dioxina perjudicial para la salud, ha manifestado este martes el ministro de Agricultura de Italia, Paolo De Castro.
"Las pérdidas que las compañías sufrirán en ese período se estiman en 20 millones de euros", dijo.
La mozarella, manjar predilecto de los italianos que se hace de la leche de búfala, desaparecerá de las tiendas y los restaurantes al menos por diez días. Las compañías que la fabrican podrán reanudar su actividad si los resultados de los análisis confirman la ausencia de dioxina en el queso y leche.
Los sindicatos de los agricultores y ganaderos no se muestran contentos con la compensación que ofrece el Gobierno, exigiendo 400 millones de euros.
La mozarella se fabrica, fundamentalmente, en Campania, región donde surgió una situación catastrófica en cuanto a la liquidación y transformación de la basura. En opinión de expertos, la dioxina se descubrió en leche porque algunos de los pastizales se ubican en zonas contaminadas por la basura.
También se señala que la mozarella "tóxica" no presenta amenaza para la salud, "si no se consume en cantidades excesivas y durante un largo tiempo".
